Meatpacking District, o el Distrito de la Carne. ¿Has oído hablar de este barrio de Nueva York? Como es fácil deducir, debe su nombre a los más de 200 mataderos que hasta hace poco se concentraban en esta zona de Nueva York.
Meatpacking es una pequeña área del Greenwich Village, junto al río Hudson, en la que aún perduran unos 30 mataderos que recuerdan sus orígenes. Lo demás, nada tiene que ver con el pasado. Hoteles de lujo como el Gansevoort, boutiques de diseñadores como Stella McCartney o Alexander McQueen y restaurantes de moda son los locales que ahora dan vida a la que
fue una de las zonas más marginales del Nueva York de los 80.
Con la nueva década llegaron nuevos aires al barrio y los 90 llevaron a sus calles a artistas, boutiques y restaurantes hasta convertirlo, hoy en día, en uno de los imprescindibles en las listas más
cool de la ciudad.
La terraza del hotel Gasenvoort o el mítico restaurante Pastis han sido escenario de la famosísima serie “Sexo en Nueva York” así que, si eres incondicional de las aventuras y desventuras de Carrie Bradshaw, seguro que te encantará conocerlos. Eso sí, si viajas dentro de poco a Nueva York, me temo que solo podrás disfrutar el Pastis desde fuera porque está temporalmente cerrado. :(
Las tiendas, los restaurantes y los escenarios televisivos están bien, pero
lo que no te puedes perder bajo ningún concepto es el High Line Park, que se extiende desde Gansevoort Street hasta West 30th Street.
High Line Park es un parque construido en altura en las antiguas vías del ferrocarril. De repente, unas viejas y abandonadas vías de tren se convierten en el espacio verde más exitoso de Nueva York. Por el High Line Park puedes pasear, sentarte y disfrutar de un momento más relajado dentro de la incansable actividad de la gran manzana.
El gran número de accidentes que tenían lugar en esa zona de Manhattan fue el detonante de la construcción, en 1930, del High Line. Gracias a este proyecto, las vías de los trenes se construyeron en altura, evitando así el peligro que suponía que los ferrocarriles circularan entre medio de las calles.
En 1980 los trenes dejaron de circular por estas vías y en 1999, cuando la estructura en desuso se iba a demoler, sus defensores consiguieron mantenerla y darle un nuevo uso:
un parque público a lo largo del río Hudson para disfrutar de una vista diferente de Manhattan. Sin duda, la mejor manera de reciclar una infraestructura en desuso en beneficio de todos.
Si vas a viajar a Nueva York próximamente, el High Line Park es una visita obligada y además, te recomiendo que antes pases por la web de la asociación
Friends of the High Line que, en colaboración con el Ayuntamiento de Nueva York, son los encargados de velar por el parque, cuidarlo, mantenerlo y darle vida.
Es más, si vas a viajar a Nueva York durante el invierno y piensas que el High Line Park no es una buena idea en esta época del año, te equivocas. En el blog de
Friends of the High Line nos dan
6 razones por las que visitar High Line Park en invierno y, la verdad, son bastante convincentes. Especialmente porque el volumen de visitantes es bastante inferior al de estaciones más cálidas y puedes disfrutar del parque nevado y, lo que es mejor, sin tanta gente.
Ya lo sabes, si estás preparando tu viaje a Nueva York, incluye en tu ruta el Meatpacking District y, sobre todo, el High Line Park. ¡Ah! Y antes de salir a desgastar tus suelas por la ciudad, ¡no te olvides de cargarte de energía con una buena ración de
granola artesanal La Newyorkina! ;)